Eran las 11.30pm, faltaba muy poco para salir .Danna me conducía por un pasillo
y nos paramos enfrente de una gran puerta. Cuando abrió la puerta, a la vista
se te venían las estanterías llenas de todo tipo de armas: pistolas, espadas,
puñales, látigos… y al lado de las armas, trajes negros y oscuros, especiales
para combatir.
Danna se dirigió hacia una
de las estanterías que en la parte izquierda se podía leer ‘Danna Tilman’. A la
derecha había otra estantería llena de armas y trajes en la que ponía ‘Alex
Grey’, y así con muchos más estantes.
-Coge lo que quieras.-dijo
Danna señalándome todas las armas. Me quedé en blanco, no sabía
nada sobre armas. Empecé a
mirar y me fijé en una pequeña pistola, la cogí y empecé a inspeccionarla.- ¿Te
ha gustado Kim? Eso confirma que tienes buen gusto.
-¿Kim? ¿Le as puesto
nombre a la pistola?
-Dirás a todas, no sólo a
esa.-dijo nombrando varios nombres de otras armas.- Has elegido bien, Kim es mi
favorita, es discreta, sencilla y muy eficaz. Es perfecta para ti.
-Pues me quedo con
ésta.-dije, y Danna se dio la vuelta y se dirigía a los trajes.
-Aunque hay un pequeño
problema.-dije y Danna se volvió para mirarme.
-¿Si? ¿Cuál?
-No sé como utilizar una
pistola.-Danna se quedó callada, mirándome fijamente, como si le hubiera
fallado el corazón en aquel momento.
-Espera, alguien ha
entrado, sin avisar.- Danna empezó a moverse sigilosamente por las estanterías,
yo me quedé atrás. Ya no la podía ver. Y al momento me percaté de que Danna se
estaba dirigiéndose hacia mí. Y pude ver que el problema se trataba de…Oli,
había entrado sin darnos cuenta. Danna lo llevaba en brazos.- Dichoso gato,
algún día me dará un infarto.-dijo, mientras soltaba al gato y lo dejaba caer.-
¿Por donde íbamos? Así, que no sabes utilizar una pistola.
-Exacto.
-En esto no hay nada que
explicar y no hace falta saber sobre pistolas y tampoco ser una profesional.
Cuando yo tengo una pistola en la mano siento una necesidad de eliminar el mal,
‘Los Grill’ en este caso, si no los eliminas pones en peligro a la humanidad, a
tu familia, a tus amigos…y en el momento en que ves que alguien querido o
cualquier persona o cosa está en peligro, tú utilizarás esta pistola y te
aseguro que no fallarás. Las balas son de un líquido especial ‘angélico’ se
podría decir, que destruye a los grills ya que tiene un aura demoníaca y
provienen de los demonios. Si no le das en el corazón sólo los debilitarás no
los matarás por eso debes darles en el corazón.-dijo Danna, en ese momento
asentía todo lo que me decía.- ¿Lo has entendido?
-Si, lo he entendido todo.
Gracias.-dije. En ese momento entraron todos los demás y se dirigieron a sus
respectivas zonas, yo me guardé el arma en la chaqueta.
-Jessica, ¿qué talla
tienes?- me preguntó Rita, mientras empezaba a rebuscar en los trajes de
combate.
-Sobre 36-38.
-Muy bien aquí tienes,
pruébatelo haber si te está bien.-dijo Rita lo cogí y me lo probé. En aquella
sala había cuartos para vestirse. Cuando acabé de ponérmelo, me miré en el
espejo me estaba apretado pero no era incómodo. Era de un color negro. Salí del
cuarto para ver si estaba Rita, pero no, al primero que me encontré fue a Alex
con su traje ya puesto, le quedaba bastante bien, con sus músculos muy
marcados. Se me quedó mirando con la boca abierta, mientras se me acercaba.
-¡Vaya! Jessi,
estas…genial.-dijo mirándome de arriba a bajo.
-Gracias. Oye una cosa
¿este boton para que sirve?-dije señalando el botón que estaban a la altura de
mi ombligo.
-Es para la comunicación
con los compañeros. Tú le das y te saldrá una lista de nombres con los que
quieres comunicarte y le das con quien quieres hablar, el traje tiene
incorporados unos micro altavoces que sólo tu puedes escuchar, y tranquila que
no se estropean.-dijo sonriéndome.
-Pues gracias por la
explicación.-dije con una sonrisa.
-De nada.-me respondió, ya
dirigiéndonos al salón.- Bueno Jessi, ésta es tu primera misión, es una pena
que no me tocara contigo de compañera. Pero de todas formas lo recordarás de
por vida… dicen que la primera misión siempre es especial.-dijo Alex con una
sonrisa.
-Si es una pena…pero será
interesante.-dije con sonrisilla. Llegamos al salón y todos estaban vestidos
con los trajes especiales y sus armas guardadas en respectivas partes de su
cuerpo y yo con Kim pegada a la cintura. Empezamos a salir Nicol, Jeremy, Danna
y Alex salieron primero para ir inspeccionando la zona y avisarnos por si había
algún peligro. Después salimos nosotros Rita, Tonny y yo.
-Por aquí.-dije.-Sólo
falta doblar la esquina de allí y llegamos al apartamento de mis padres.-los
demás estaban escondidos y siguiendo nuestros pasos, doblamos la esquina, vimos
el portal del edificio y subimos las escaleras hasta estar enfrente de la
puerta de casa. Tonny me cogió del hombro y me puso tras de él.
-Espera Jess…tengo un mal
presentimiento. Rita, ten cuidado…- Rita asintió, yo le di la llave de casa
para que abriera la puerta y entré después de Tonny y Rita.
-¡¿Papá?! ¡¿Mamá?!- grité.
-Sshhh… calla, puede haber
un grill.-me dijo Tonny.
Rita y Tonny empezaron a
investigar por la casa yo me quedé quieta.
-No hay nadie…Jessica ve a
coger tus cosas, ropa, libros, dinero lo que necesites durante una temporada.
-Vale.-dije, y me puse en
camino hacia mi cuarto y empecé a hacer la maleta llenándola de ropa y dinero
que tenía ahorrado. Cogí la maleta y la llevé al salón.
-¿Ya estás lista?- dijo
Rita a su lado estaba Tonny.
-Si, pero mis padres ¿que?
No les he dicho nada y tampoco a Lucas, seguro que están muy preocupados.
-Ya los encontraremos y se
lo haremos saber.-me consoló Rita.
-¡Rita!-gritó Tonny desde
el otro lado del patio donde solo había una escalera que conducía al ático y
bajo la escalera estaba el cuarto de la limpieza.-Ven rápido.
-¿Qué ocurre?- dijo
dirigiéndose al lado de Tonny, yo la seguí.
-¿Ves esas manchas de
sangre? Creo que conducen a alguna parte que no habíamos investigado.
-Si, estoy segura de
ello.- yo estaba temblando, no había visto tanta sangre por el suelo en mi
vida. Llegamos a la puerta del cuarto de la limpieza que había debajo de la
escalera, donde acababa el recorrido de la sangre. Y Tonny abrió la puerta y
del cuartillo cayeron al suelo dos cuerpos. En ese momento empecé a llorar como
nunca lo había echo. No podía parar, me había inundado en un momento de
tristeza, oscuridad y soledad. No podía creer que mis padres estuvieran en
aquella situación. No podía ser cierto. Retrocedí unos pasos para alejarme un
poco de aquello.
-Jessica ¿los conoces?
¿Son tus padres?-me preguntó Rita, no podía contestarle, estaba destrozada por
aquello y no podía parar de llorar. Tonny se me acercó y me abrazó.
-No te preocupes… tus
padres están en un sitio mejor. Ahora nosotros somos tu familia.- me abracé mas
fuerte a él, hundí mi cara en su hombro estuve asín unos segundos, me separé de
Tonny y me limpié las lágrimas con la manga del traje.
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